El tapir y sus crias
Los tapires provienen de un grupo antiguo de animales pariente de los caballos y rinocerontes primitivos. Aparentemente el género Tapirus apareció en Europa a partir de donde se dispersó a Asia y Norte América. Posteriormente se dispersó a centroamérica y Sur América.
Los tapires provienen de un grupo antiguo de animales pariente de los caballos y rinocerontes primitivos. Aparentemente el género Tapirus apareció en Europa a partir de donde se dispersó a Asia y Norte América. Posteriormente se dispersó a centroamérica y Sur América.
Las crías de tapir nacen cubiertas de rayas y manchas negras, amarillas y blancas, que les sirven de camuflaje contra los depredadores durante estos vulnerables primeros meses de vida. Estas rayas y manchas se desvanecen lentamente y desaparecen por completo en cinco o seis meses.
Alcanzan la madurez sexual entre los 2.5 y 4 años, los machos presentan una gran actividad durante el celo, caminando, corriendo, sumergiéndose en el agua, mordiéndose mutuamente las patas y el cuerpo, y efectuando repetidos intentos de cópula, acompañados de fuertes silbidos hasta lograr la cópula definitiva.
Este animal solitario, de hábitos generalmente nocturnos se caracteriza por manifestar un comportamiento tranquilo y tímido, se comunica mediante un silbido de tono alto. Delimita su territorio apilando excrementos, orinando en los mismos sitios y dejando marcas olfativas con sus glándulas faciales.